La restauración de las andas de procesión de la imagen de San Agustín se planteó por iniciativa de la Asociación de Vecinos Facay, que para ello solicitó la colaboración del Cabildo de Fuerteventura.
Las andas de San Agustín son de estilo neoclásico. Realizadas entre 1792 y 1800, su costo ascendió entonces a 450 reales la hechura y se calcularon además 300 reales de oro y colores, según consta en la documentación de la época. De este último dato se dedujo que hubo en su momento una intención de dorar la obra, así como de policromarla en varios colores. Sin embargo, tras los trabajos de restauraciones ha podido comprobar que no existen restos de dorado y que los únicos colores que se aprecian (azul y rojo) están muy matizados e igualados por el blanco, que sólo deja transparentar ligeramente los tonos. Probablemente son de una época posterior, siempre dentro del siglo XIX. Es decir, que no llegó a cumplirse la intención primera de policromar y dorarlas andas y que, ya avanzando el siglo XIX, se realizó la decoración, más simple y claramente neoclásica, que exhibe actualmente tras la restauración.
El proyecto de restauración de las andas ha corrido a cargo de la especialista María Jesús Morante, al frente de un equipo integrado por Alicia Morales y José Melián.