El Consejo Internacional de Coordinación del programa Man and Biosphere (MaB) de la UNESCO acordó ayer tarde la declaración de la Isla de Fuerteventura como ‘Reserva Mundial de la Biosfera’, en el marco de la reunión anual que el Consejo viene celebrando en Corea durante esta semana. “Es la culminación de una primera parte de una línea de trabajo que nos trazamos desde la Legislatura pasada en el Cabildo de Fuerteventura y que ha ido avanzando y dando pasos gracias al apoyo de todos los ayuntamientos, de todas las fuerzas políticas y del Gobierno de Canarias y del Estado”, explicó el presidente del Cabildo de Fuerteventura.
Mario Cabrera consideró además que esta declaración es una muestra “del compromiso colectivo de Fuerteventura, que ahora fructifica, pero que es un paso más en un camino más amplio que nos hemos trazado hacia otro tipo de desarrollo, muy relacionado con el Plan de Ordenación de Fuerteventura y el Plan Turístico, y preparado también para avanzar hacia el Parque Nacional de Zonas Áridas de Fuerteventura, en el que también estamos trabajando”
Gobierno de Canarias
El presidente del Cabildo de Fuerteventura agradeció el apoyo recibido por parte del presidente del Gobierno de Canarias, Paulino Rivero, quien en el transcurso de una rueda de prensa celebrada esta mañana expresó sus felicitaciones “al Cabildo de Fuerteventura y a todos los municipios de la isla y en general a toda la sociedad insular por el nombramiento de Reserva de la Biosfera. Hay que poner en valor esta designación, que servirá para seguir generando conciencia en torno a la necesidad de apostar claramente por el futuro en clave sostenible”
Ministerio
El presidente del Cabildo de Fuerteventura agradeció también el respaldo expresado públicamente por parte del Ministerio del Medio Ambiente, Rural y Marino (MARM) a esta declaración, y desde donde se ha apuntado que: “La isla de Fuerteventura está inmersa en un proceso de transición hacia una estrategia territorial de sostenibilidad, iniciada por el Plan Insular de Ordenación de Fuerteventura (PIOF), en vigor desde el año 2003, y continuada en el Plan Territorial Especial de Ordenación del Turismo de la isla de Fuerteventura (PTEOTIF)”.
El Ministerio subraya que “el planeamiento insular apuesta por una oferta turística cualificada y diversificada, basada en el reconocimiento de la necesidad de preservación del medio ambiente y de la planificación integral del territorio. Existe la convicción de que el turismo es, a la vez, el principal pilar de la economía y la principal amenaza a la sostenibilidad de este territorio, por lo que se trata de evitar la concentración en las zonas frágiles, como es el sector costero, y revitalizar los núcleos tradicionales localizados en el interior de la isla”.
Las gestiones para la declaración de Fuerteventura como Reserva de Biosfera han sido desarrolladas desde el Cabildo de Fuerteventura, y gracias al apoyo del Gobierno de Canarias y los ayuntamientos majoreros. En su tramitación se ha valorado la importancia de la Isla como ecosistema de zonas áridas que la ha llevado a ser incluida previamente en la Red Natura 2000 con 13 espacios naturales (48.328 has) como Lugares de Interés Comunitario (LICs) y 9 espacios naturales (68.713 has) como Zonas de Especial Protección de Aves (ZEPAs). El Saladar de Jandía es además la única zona Ramsar declarada en Canarias.
La Reserva de la Biosfera de Fuerteventura comprende todo el territorio insular más una franja marina de 5 millas en el sector oeste y de 3 millas en el resto de la isla. En total alcanza una extensión de 352.812,6 has, de las cuales 165.665,2 has (46,9%) son terrestres y 187.835,7 has (53,1%) están en medio marino. Su superficie es notablemente mayor que la media de las Reservas de la Biosfera españolas, estimada en 81.683 has (MaB 2006), y la mayor en cuanto a superficie marina.
